Después de un año con el gigante, la hormiga tiene que irse. El gigante decía que estaba haciendo una gran inversión en ella, que lo tuviese en cuenta para no irse antes del plazo acordado.
La puso contra las cuerdas pidiéndo que diese su palabra de que no se iba a ir y trabajaría ahí para él, aun a sabiendas de que las condiciones no eran para nada buenas y que cualquiera podría pretender irse si encontraba algo mejor, entonces, ¿qué clase de persona se es cuando sabes que vas a explotar a alguien y aún así le pides que te de su palabra de que no se va a ir?
La hormiguita a aprendido, ya no la volverá a pasar.
pero estas si que son buenas...
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